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05 marzo, 2008

Guillermo Vargas Habacuc y Jaime Ferrero

Bienvenidos a Artesanos del Metal.

Hoy me acaban de llegar dos email sobre el maltrato hacia los animales y kería dejar akí la denuncia pública de estos dos casos.

Esto clama al cielo y lo peor de todo es ke lo kería publicar como hoax en la sección correspondiente pero resulta ke he confirmado ke no lo es, es triste cruel y aberrantemente cierto.

En el primer caso, un supuesto artista llamado Guillermo Vargas Habacuc mostró al público su obra titulada "Eres lo que lees", las letras estan pegadas a la pared y hechas con comida para perros, justo enfrente de esto hay un perro callejero llamado Natividad, famélico y que permanece sin agua ni comida delante de esas letras escritas con comida para perros hasta la muerte por inanición/deshidratación sin ke nadie haga nada.

De tan horrible ke era no pude evitar pensar en los gatitos bonsai contra los ke se alzaron muchas voces de protesta en internet y solo resultaba ser una broma macabra, un maldito HOAX.

De este me kedo sin palabras, ved el video vosotros mismos, pero sabed ke es cierto. Hay también una dirección de www.petitiononline.com, pero no la doy porque las firmas de denuncia en lugares como ese no tienen ninguna clase de validez legal, solo lo digo akí para ke si alguien oye hablar de ese "artista" sepa de lo ke va el tema y lo echen a patadas.




Del siguiente nos toca más de cerca a los españoles, pero es igual de repulsivo.

Este podría ser miembro de la alcaldía


Este individuo, Jaime Ferrero, integrante de la candidatura del PP a la Alcaldía en Talavera, tiene como deporte lo que muestran las siguientes imagenes, tal vez este individuo desconoce que matar animales a pedradas para luego mofarse está castigado por la ley, como se refleja en la ley de protección animal de Castilla La Mancha.
Ley 7/1990, de 28 de diciembre, de Protección de los Animales Domésticos.
BOE núm. 93, de 18-4-1991, [pág. 12062] DOCM núm. 1, de 2-1-1991, [pág. 5]

Art. 2
2. Se prohíbe:
a) Maltratar o agredir a los animales domésticos o someterlos, a cualquier otra práctica que les pueda producir, sin causa justificada, sufrimientos, daños o la muerte
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